sábado, 22 de junio de 2019

La “Torrecilla”: una Custodia procesional muy viajera.

Al ir manejando la documentación depositada en el Archivo Municipal van apareciendo documentos ciertamente curiosos e interesantes que nos “invitan” a seguir su rastro o el porqué de lo que su contenido nos narra.

Pudiera suceder que no acertáramos en nuestro cometido, pero nuestro cariño por los documentos y el camino abierto para que otros trabajen sobre el tema nos anima a ello.

Aprovechando la fecha del 23 de junio, que así aparece en la copia de los estatutos conservados en el Archivo Parroquial de Santa María y coincidir este año el 475 aniversario de la redacción de los estatutos del año 1544 -en el mismo día- con la celebración del Corpus Christi, vamos a intentar hacer un pequeño recorrido por los avatares que han llevado a la Custodia procesional, que popularmente llamamos “Torrecilla”, a ser una viajera durante los últimos cien años.


Detalle de la fecha de 23 de junio de 1544, aparecido en los Estatutos de la Cofradía.

Partiendo de este principio, aprovecharemos la información que nos da un documento emitido desde la Junta Central del Tesoro Artístico perteneciente al Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, fechado en Valencia el día 18 de Junio de 1937. Dicho oficio fue dirigido a D. Manuel Fernández Uclés, Abogado y Oficial de Correos en la Administración principal de Correos de Murcia, el cual dice así:

“Acusamos a Vd. Recibo de su atento escrito, fecha 14 de los corrientes relacionado con las obras de arte que fueron propiedad de la iglesia en el pueblo de Huéscar (Granada).

Con esta misma fecha se pone el hecho en conocimiento de las Juntas Delegadas de Protección, Incautación y Salvamento del Tesoro Artístico de las provincias de Murcia y Granada (la presidencia de esta última radica en Guadix, Don Isidro Cavero Martínez, Comisario-Director del Instituto Nacional de segunda enseñanza de dicha localidad) para que con la urgencia que el caso requiere adopten las medidas necesarias para que rescaten al patrimonio artístico nacional las mencionadas joyas de arte, principalmente las dos custodias, ya que según sus indicaciones están en peligro de poder ser fundidas.

Hago a Vd. patente el reconocimiento y gratitud de esta Junta de mi presidencia por su alto gesto cívico y por su patriótica iniciativa en pró de nuestro gran acerbo cultural.

Valencia 18 de Junio de 1937

El Presidente

Timoteo Pérez Rubio (rúbrica)

Contiene los sellos estampados de:
Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes (tinta azul)
Ministerio de Instrucción Pública – Junta Central del Tesoro Artístico (tinta negra)

 


1.- “Exposición de Orfebrería y Ropas de Culto, (Arte español de los siglos XV al XIX). Madrid, Museo Arqueológico Nacional, 1941.

El Inspector General de Museos Arqueológicos, Joaquín Mª. de Navascués, decía en su memoria sobre la “Exposición de Orfebrería y Ropas de Culto, (Arte español de los siglos XV al XIX)”, celebrada en Madrid en el Museo Arqueológico Nacional en 1941 que:

“…La riqueza artística acumulada en el Museo Arqueológico Nacional durante la dominación marxista de Madrid, procedente de la capital y su provincia y de las de Cuenca, Guadalajara y Toledo, principalmente, ofrecía un especialísimo interés para el estudio del desarrollo y evolución de las artes industriales en el corazón geográfico de España. Quien suscribe quedó encargado, a raíz de la liberación de Madrid, como agente del Servicio de Defensa del Patrimonio Artístico Nacional, de la organización de la devolución de las piezas custodiadas en aquel depósito. Era extraordinariamente tentador detener todas aquellas colecciones, que representaban considerable cantidad de materiales, a fin de reunir los datos más completos que pudieran soñarse para una profunda investigación histórico-artística. Pero esta idea chocaba con el legítimo interés y necesidad de los propietarios a quienes había que devolver lo que era suyo. La empresa, por otra parte, representaba un trabajo inasequible a corto plazo. No obstante, la idea fue madurando, y surgió la de hacer una exposición circunscrita a las piezas más notables.

Al fin fue posible pensar, reduciendo la ambición, en una exposición de las dos series que más podían interesar desde el punto de vista de lo español: orfebrería y ropas de culto, proporcionando éstas abundante material de tejidos y bordados sobre todo. La exposición era también imprescindible a los fines del reconocimiento de las piezas cuyos propietarios eran desconocidos para el Servicio…”.

Fue en la “Sala II: Época de Carlos V (1517 a 1556)”, donde se ubicó la “Torrecilla”.




Hemos de recordar que la custodia de Huéscar apareció en un depósito de obras de arte españolas en Ginebra (Suiza). Estas obras fueron allí trasladadas durante la Guerra Civil (1936-1939). Tras finalizar esta, el nuevo gobierno consiguió su devolución y fueron depositadas en Madrid en distintos lugares hasta averiguar su origen y propiedad.

Habiendo sido visitada dicha exposición por personas que reconocieron el origen y propiedad de la custodia, dieron aviso a la Parroquia de Huéscar y desde aquí se trasladó una pequeña comisión, entre los que se encontraba el sacristán Pascual Castillo Ruiz, que fue quién demostró a las autoridades del museo como se colocaba correctamente el Viril de dicha custodia, que había sido guardado en Huéscar durante la contienda y que fue llevado a Madrid para tal cometido.

La exposición fue solemnemente inaugurada por el Ministro de Educación Nacional el 10 de Junio de 1941, y después de una clausura temporal durante los meses de Agosto a Septiembre, lo fue definitivamente el 9 de Diciembre.

Para su catalogación y estudio se redactó la ficha oportuna cuyo contenido la describía de la siguiente manera:




“Custodia en forma de templete de plata exagonal y tres cuerpos sobrepuestos.

La base general de la Custodia la forma una peana de planta exagonal, rematada con molduraje romano en sus bordes alto y bajo y decorada en cada uno de sus lados verticales con escenas repujadas y cinceladas muy finamente, en altorrelieve muy acusado, que llega a dejarlas casi exentas en muchos casos. Las escenas son las siguientes:

1.- Escudo central liso con borduras y escusón grabados. A la izquierda pareja de hombres barbados semidesnudos luchando, sobre fondo de paisaje, uno de ellos con escudo oval en su mano izquierda, espada en la derecha y manto flotante sobre el hombro izquierdo, mientras que el otro coge  con ambas manos una cachiporra con la que hiere al anterior en la nalga. A la derecha, otra pareja de guerreros, estos vestidos con coraza, loriga y hombreras, armados con escudos ovales pequeños y espadas: van sobre fondo de paisaje.

2.- A la izquierda fondo de ciudad entre peñas; en primer lugar dos figuras masculinas que marchan hacia ella; la de delante un viejo barbado que se apoya en bastón con la mano izquierda y muestra la ciudad con la derecha al mancebo que le sigue, el cual le oye con asombro apuntando también a la ciudad y llevándose la mano izquierda al corazón. A la derecha de la escena: sobre lejanía de ciudad, viejo barbado durmiendo recostado sobre su manto echado en ropas y sobre el viene un ángel volando que le pone algo sobre la cabeza con la mano derecha, y que con la izquierda señala a un jarro y un pan sobre las rocas.

3.- La visita de los tres ángeles a Abraham.

Sobre la lejanía de ciudad, peñas y árboles, están a la izquierda los tres ángeles, con mesa oval de pie abalaustrado entre ellos, cubierta con mantel y sobre él plato y panes: uno de los mancebos se lleva fruta a la boca; otro, parte el pan con el cuchillo; el tercero, recibe de manos de Abraham una bandeja con algo como un pan o torta. A la derecha de la escena Sara, se vuelve hacia una tienda entreabierta, donde se ven jarros y fuentes y lleva en sus manos una bandeja con frutas.

4.- Escudo central liso con bordura y escusón grabados, entre dos parejas de guerreros combatientes. Los de la izquierda se cubren con morriones, llevan corazas, se defienden con sendos escudos, uno oval y otro de caprichosa forma, y se atacan con mazas, sobre fondo fino de paisaje. De los de la derecha, uno se cubre con morrión y otro está destocado, llevan también coraza y calzas, y se acometen sin escudo, el uno con espada corta o puñal, y el otro con clava que blande con las dos manos. Fondo también de paisaje fino.

5.- La lluvia milagrosa del Maná.

Grupo tumultuoso, presidido en el centro por el busto de Jehová entre el rompimiento de nubes, de las que cae el Maná. Hacia este se arrojan hombres, mujeres y niños en multitud de actitudes, mientras otros juntan sus manos en oración y varios llevan cestillos sobre sus cabezas. En primer término izquierda Moisés y Aarón tras él, y en el de la derecha otras figuras de mujeres y niños que se libran (¿equilibran?) la composición.

6.- Escenas de la vida de Ruth.

Fondo general de paisaje con rocas y lejanías de ciudad. A la izquierda: encuentro de Ruth, que lleva un brazado de espigas bajo su brazo derecho, con Brooz, que habla con ella levantando su diestra al cielo. A continuación: Brooz recibe de manos de Ruth una bandeja con panes o frutos. Por último, sobre fondo de pórtico neoclásico, Viene corriendo un chiquillo que sostiene con sus manos tras su cabeza y su cuerpo, un manto flotante.

Sobre este zócalo así decorado arranca el primer cuerpo del templete que apoya en basas compuestas de perfil romano y planta cuadrada hacia fuera y en ángulo hacia adentro, que llevan cada una de sus caras externas decoradas en fuerte repujado con temas variadísimos, que suelen ser bustos de mujeres, ancianos, o guerreros, dentro de medallones en la cara más externa de la base, figuras mitológicas de cuerpo entero o trofeos en las caras laterales y temas más sencillos vegetales o de trofeo en las internas. Encima de estas basas, y sobre su parte angulada cabalga un cuerpo de pilastras con arcos de medio punto incluidos, rematado un entablamento corrido, y en la parte cuadrada saliente seis columnas abalaustradas muy ricas y esbeltas. Las pilastras se decoran por repujado en sus caras externas e interna con largas tiras de grutescos, y las columnas son cinceladas con pabellones, hojas de acanto, trofeos, etc. Las claves de los arcos son de cartela cincelada y hojas de acanto, y las enjutas, caladas, llevan incluidas cabecitas cinceladas. El entablamento se decora encima de las pilastras con figurillas desnudas fantásticas y sobre los arcos con escenas completas mitológicas y de luchas con animales, cacería, etc. Unas y otras están hechas en muy alto repujado.

Por remate de todo este cuerpo bajo van sobre las columnas abalaustradas seis ángeles sobre peanas cilíndricas, que llevan en sus manos símbolos de la Pasión, como columna, azotes, calla, escalera y clavos. El remate encima de los arcos es una serie de grupos fantásticos repujados y cincelados, de contorno general triangular, con representaciones de sátiros y bichas entre follaje.

En el interior de este cuerpo que se cubre con una cúpula de gallones rebajada se aloja el pie del viril, en forma de astil abalaustrado con cuerpo de jarrón, basa cilíndrica y pie circular decorado con tornapuntas, pabellones, medallones con bustos, hojas de acanto, etc.

El segundo cuerpo es más bajo y estrecho que el anterior, pero de organización muy semejante, y tiene dentro una peana cilíndrica gallonada. Tiene igualmente seis arcos de medio punto, con clave de cartelas, de la que penden campanitas entre columnas de fuste cilíndrico decorado con trofeos repujados y coronadas por capitel muy sencillo de hojas de acanto lisas. Estas columnas se plantean con seis pilastras cuadradas y puestas de ángulo, estriadas de abajo a arriba y coronadas por capiteles semejantes a los de las columnas. El remate general de todo este cuerpo es un entablamento completo que corre sobre el templete y que se destaca sobre las pilastras a manera de ático, decorado en sus caras con cabecitas, bustos y temas de grutescos repujados. Sobre el van encima de las pilastras una serie de estatuillas con peana cilíndrica fundidas, cincelas, y doradas, que parecen ser de apóstoles, y encima de los arcos unas cresterías agudas de angelitos, querubines, tornapuntas y flameros.

El tercer cuerpo tiene también arquillos de medio punto, más sencillos que los anteriores, de cuyas claves penden campanitas, flanqueados por seis tenantes a manera de cariátida alternando tres masculinos cuya base es de columna abalaustrada con tres  femeninos en que la base es de pilastra sismática estrecha. El entablamento de coronación de este cuerpo lleva repujados sencillos temas de grutescos. En el interior del templete pende una gran campana, y por remate de todo él van seis estatuillas fundidas y doradas de niños sobre peana cilíndrica y unas cresterías de bustos en medallones llevados por genios alados y rematados en doble venera.

El remate general de la custodia es una estatua de Cristo resucitado con banderola en su mano izquierda, que apoya el pie del mismo lado sobre una calavera, fundida, cincelada, y dorada, que va sobre un pedestal cilíndrico decorado con cabecitas de querubines y pabellones de guirnaldas. Este pedestal, a su vez, apoya en un cuerpo abullonado de chapa repujado finamente con grutescos y dos bustos en medallones.
  
Los punzones se repiten con mucha frecuencia (el de Jaén y el de Dº L) en las enjutas de los arcos y en el interior de los templetes.


Detalle de la imagen de la ficha, en el que se aprecia el estado de la Custodia,
en el Museo Arqueológico Nacional.

Entregada a la Parroquia de Huéscar (Granada). Acta nº 3637. Fecha 12-5-42”.


2.- Exposición “Inmaculada”. Madrid, Catedral de la Almudena, Mayo-Octubre de 2005.

La exposición “Inmaculada”, reunió hasta el 12 de octubre en la catedral de La Almudena un conjunto de 132 obras -algunas jamás sacadas de sus lugares de origen- procedentes de toda España, fue inaugurada ayer por los Duques de Lugo. Organizada al alimón por la Conferencia Episcopal y la Fundación Las Edades del Hombre, forma parte del programa de actos de la Iglesia española para conmemorar el 150 aniversario de la proclamación del Dogma de la Inmaculada Concepción.

La muestra estuvo organizada en cuatro capítulos que discurrieron entre un prólogo y un epílogo representado por la única obra moderna de la exposición: un lienzo encargado por la Casa de la Iglesia a la pintora y monja cisterciense Isabel Guerra.

El primer capítulo, titulado «Para gloria de la Madre de Dios», daba cuenta de la justificación del Dogma a través de seis piezas románicas, que simbolizan las Vírgenes en Majestad, entre las que destacaba la Virgen del Tesoro de la catedral de Toledo. El segundo llevó el título de «Balbuceos», mientras que el tercer capítulo se denominó «A la búsqueda de su identidad». El último espacio antes del epílogo, titulado «Del esplendor a la Definición Dogmática», contuvo piezas del barroco castellano, andaluz y madrileño.

En la muestra se encontraron obras de Zurbarán, Murillo, Juan Miranda, Pedro Berruguete, Pedro de Mena, El Greco, Juan de Juni, Claudio Coello o Gregorio Fernández, entre otros artistas.

La exposición fue organizada por la Conferencia Episcopal y Las Edades del Hombre.


Portada del catálogo de la exposición "Inmaculada".


3.- Exposición “Maestros plateros en Jaén”. Realizada en la Catedral de Jaén, del 15 de Diciembre de 2016 al 2 de Abril de 2017.

La exposición reunió una destacada selección de obras de platería de los siglos XVI al XVIII, buena parte de ellas realizada por maestros de la provincia de Jaén, a las que se sumaron piezas procedentes de otros focos de producción como el castellano y el cordobés.

Entre los tesoros que se pudieron admirar destacaron la Custodia de Fuente Ovejuna, obra de Juan Ruiz el Vandalino, la “Torrecilla de Huéscar” de Francisco Muñiz y diversas obras de los talleres jiennenses de los Morales (siglo XVII) y los Guzmán (siglo XVIII).

Situada en ante-sacristía y en las galerías altas del templo catedralicio, la muestra fue  organizada por la Fundación Caja Rural de Jaén y el Cabildo de la Catedral con la colaboración de la Universidad de Jaén (UJA).

Lo más llamativo de esta exposición fue que el cartel anunciador de tal exposición estaba presidido por la imagen de la “Torrecilla”.


Cartel de la exposición "Maestros plateros de Jaén".





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Fuentes:

Archivo Histórico Municipal de Huéscar.

Archivo Parroquial de Santa María la Mayor de Huéscar.

Museo Arqueológico Nacional de España. Madrid.


Bibliografía:

COMISARIA GENERAL DEL SERVICIO DE DEFENSA DEL PATRIMONIO ARTISTICO NACIONAL.- Exposición de Orfebrería y Ropas de Culto (Arte Español de los siglos XV al XIX). Madrid, 1941. Contiene: un Prólogo, por Francisco Iñiguez Almech. El local y la instalación, por Joaquín María de Navascués y de Juan. Indicaciones generales. Catálogo de la Exposición: Orfebrería, por Emilio Camps y Cazarla, y Ropas, por Felipa Niño y Mas.

CAMPS y CAZORLA, Emilio: Una visita a la Exposición de Orfebrería y Ropas de Culto. En el "Boletín de la Sociedad Española de Excursiones". Madrid, 1941; páginas 108 y 206. La custodia de la Catedral de Sigüenza y su autor. lb. núm. 47. Madrid, 1941; pág. 43I.

MERGELINA, Cayetano de: Sobre una Exposición. En el "Boletín del Seminario de Estudios de Arte y Arqueología" de la Facultad de Historia de la Universidad de Valladolid. Tomo VII. Valladolid, 1940-41; pág. 237.

NAVASCUÉS y DE JUAN, Joaquín María de: Exposición de Orfebrería y objetos de Culto ... 1941, Problemas museológicos. La disposición arquitectónica del local. En "Arte Español", Tomo XIII. Madrid, cuarto trimestre, 1941; pág. 3.

NIÑO y MAS, Felipa: Las mitras de Roda. En "Archivo Español de Arte", núm. 43. Madrid, 1941; pág. 138. Una obra del bordador de cámara Antonio Gómez de los Ríos. Ib., núm. 45. Madrid, 1941; pág. 309.

Inmaculada : Santa Iglesia Catedral de Santa María la Real de la Almudena, Madrid, [mayo-octubre] 2005. [Valladolid] : Fundación "Las Edades del Hombre", [2005]

Maestros plateros de Jaén : Catedral de Jaén : 15 diciembre 2016 - 2 abril 2017 / [comisaria, Rosario Anguita Herrador]. [Jaén] : Fundación Caja Rural de Jaén, D.L. 2017.